Muchos hemos escuchado sobre “Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas”, de Lewis Carroll, quien narra la historia de una niña que cae en un mundo sin sentido, pero que, en este mundo antropomorfo se encuentra con lo esencial para empezar una nueva historia y superar sus miedos, su ser.
Para hablar de los objetivos, metas o logros, necesitamos partir de un pensamiento clave, ¿Quién lo hará? Pues para conseguir un objetivo, necesitamos tomar una decisión, y asumir un rol protagónico, de lo contrario la realidad se alejará de nosotros y nos refugiaremos en un mundo sin sentido, como “soy muy pequeño para alcanzar tan alto objeto” o “soy muy grande para entrar por esta puerta tan pequeña” o “que nadie haga ruido para empezar a trabajar” y al esperar una escena segura aplazaremos el encuentro con uno mismo, con la valentía, la perseverancia, la objetividad y el amor por uno.
Francis Bacon dijo: “La ocasión hay que crearla, no esperar a que llegue”.
Y es que, con cada logro alcanzado, estaremos encontrando una parte que no veíamos claramente en nosotros y esto nutrirá nuestro ego, parte de nuestra identidad y base para lograr el amor en uno; un ego sano, que nos hace conscientes que somos distintos, pero no distantes, pues en este proceso de crear, habrá un efecto colateral para el servicio hacia los demás.
El emprender un objetivo nos lleva a la valoración del ser, y a desmoronar lo que se dice del ser, en pocas palabras entramos al descubrimiento de nuestras capacidades, y si se hace en un medio complicado o de crisis, el beneficio puede ser mayor, pues nos lleva a buscar más herramientas y recursos de esta fuente valiosa, entrenándose en la repetición y desarrollándose con la disciplina.
“La crisis es la mejor bendición que le puede suceder a las personas y países, porque la crisis trae progresos, la creatividad nace de la angustia, como el día nace de la noche oscura, es en la crisis donde nacen las inventivas, los descubrimientos y las grandes estrategias, quien supera la crisis, se supera a sí mismo, sin quedar superado. Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias, violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones, la verdadera crisis es la crisis de la incompetencia, el inconveniente de las personas y países es la pereza para encontrar las salidas y las soluciones”. Alberth Einstein.
Esa es la experiencia que pasaron, Michael Phelps, campeón olímpico de natación y quien tiene una enfermedad que le ha deformado las piernas entre otros síntomas, pero que superando esta situación, no es un impedimento para que pueda conseguir sus objetivos; Nick James Vujicic, orador internacional, quien nació sin brazos ni piernas, y después de pasar una etapa de crisis infantil, descubre las posibilidades de acción que tiene. Bueno y si me dicen, “pero no se comparan con la situación social del COVID - 19 que estamos viviendo, les recuerdo que Annelies Marie Frank, Ana Frank, una niña que vivió dos años y medio, ocultándose de los alemanes en medio de la guerra, pero que tenía un objetivo, vivir.
Pero cada uno de nosotros ha recibido, en este tiempo, la solicitud de un encuentro, con lo que necesiten, valentía, paciencia, objetividad, claridad, confianza, etc., cada uno debe de saber qué es lo que necesita, y los objetivos en medio de este tiempo de COVID – 19 nos ayudaran a mantenernos sanos, como dice Hans Selye: “Para mantener la salud, el ser humano debe tener un objetivo, un propósito en la vida que respete y por el que se sienta orgulloso de luchar. La inspiración en un ideal y en un propósito común es la mejor manera de ayudar a cada persona a soportar las penalidades”
Tomen la decisión y den una respuesta a la solicitud que la vida les ha entregado, ánimo y valentía en su camino.
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